El mundo idílico de Immaculée Ilibagiza se vino abajo en
1994, cuando Ruanda fue víctima de un genocidio sangriento que sesgó las vidas
de más de un millón de personas. De pronto, Immaculée pasó de ser de una
universitaria con "una vida preciosa" a una persona que hacía lo que
fuera necesario para sobrevivir.
Durante 91 días, ella y siete mujeres más permanecieron
escondidas, hacinadas en el baño de un pastor de la localidad, mientras cientos
de asesinos armados con machetes las buscaban. Sin embargo, hasta en esas
circunstancias extremas, Immaculée supo descubrir el poder de la plegaria y
forjó una relación profunda y duradera con Dios.
Gracias a ello, al final pudo buscar y perdonar a los
asesinos de su familia. Este no es más que el punto de partida de su historia;
también descubrirá el increíble camino que la llevó a convertirse en escritora
y conferenciante, que habla para públicos de todo el planeta.
Que tremendo testimonio de esta mujer. Dios puede cambiar la maldicion en bendicion. Gracias por compartirlo!
ResponderEliminar