“YO DESEO ________________ (completar aquí con lo que uno está pidiendo). EN ARMONÍA PARA TODO EL MUNDO Y DE ACUERDO CON LA VOLUNTAD DIVINA. BAJO LA GRACIA Y DE MANERA PERFECTA. GRACIAS PADRE (MADRE, DIOS, UNIVERSO, COMO SEA QUE TU TE DIRIJAS A UNA DIVINIDAD ESPECIFICA) QUE YA ME OÍSTE”
Ahora conozcamos el porqué de cada una de las frases empleadas en el tratamiento. Cada una es una poderosa afirmación que funciona para un fin especial en tu tratamiento.
“En armonía para todo el mundo” elimina todo peligro de que tu conveniencia perjudique a otro, como tampoco se te hace posible desear un mal para alguien mas.
Al decir “de acuerdo con la voluntad divina” si lo que tú deseas es menos que perfecto para tí, verás suceder algo mucho mejor de lo que tú esperabas. En este caso significa que lo que estabas deseando no lo ibas a encontrar suficiente, o no te iba a resultar tan bueno como tú pensabas. La voluntad Divina es perfecta.
Al tú decir “bajo la Gracia y de manera perfecta” encierra un secreto maravilloso. El mismo libro nos da un ejemplo de lo que ocurre si no se sabe pedir bajo la Gracia y perfección: Una señora necesitaba urgentemente una suma de dinero, y la pidió asimismo: para el día 15 del mes. Tenía absoluta fe de que la recibiría, pero su egoísmo e indiferencia no le inspiró pedirla con alguna consideración para nadie más. Al día siguiente un automóvil atropello a su hija, y el día 15 del mes recibió la suma exacta que ella había pedido. Se la pagó la Compañía de Seguros por el accidente de su hija. Ella trabajó contra la ley y contra ella misma. Por eso esta pequeña frase es tan importante.
Pedir “bajo la Gracia y de manera perfecta” es trabajar con la ley espiritual, donde todo es perfecto, sin obstáculos, sin inconvenientes, sin tropiezos ni daños, sin luchas ni esfuerzos. Tal cual es nuestra VERDAD.
“Gracias “____” que ya me oíste” es la expresión más alta de fe que podamos abrigar. Dando gracias anticipadamente a la manifestación, nos coloca en una posición de fe absoluta y convencimiento de que aquello ya está dado.
Todo lo que deseas, toda necesidad que abrigues puedes llegar a manifestar. Pide en grande, para esta ley Divina no existen límites, así que no los impongas tú. Todo lo que tienes que hacer es pedir de manera correcta e iras viendo a todos tus deseos, desde el más simple hasta el más grande manifestarse, realizarse de acuerdo a nuestra VERDAD.
Ahora bien, es muy común que al empezar a usar este tipo de tratamientos nos sea difícil sentir la fe absoluta necesaria para ellos. Estamos tan acostumbrados a sentir temor, por cualquier serie de razones, que es necesario trabajar para disolverlo. La mejor manera de deshacernos de una costumbre es sustituirla por otra, así que para estos efectos si deseamos sustituir el temor por fe recomendamos la siguiente fórmula:
“YO NO TENGO MIEDO. NO QUIERO EL TEMOR. DIOS (MADRE, PADRE, O COMO TU LE LLAMES) ES AMOR Y EN TODA LA CREACIÓN NO HAY NADA A QUÉ TEMER. YO TENGO FE. QUIERO SENTIR FE”
El Decreto, Formula Mágica, Tratamiento, Afirmación o cualquiera que sea el nombre con el que mejor lo identifiques es una poderosa herramienta espiritual, es una poderosa fuente creativa que solo espera a que la utilices para como aquel genio mágico de la lámpara de Aladino obedecer y hacer de tus deseos órdenes. Pero no solo lo creas ciegamente…pruébalo, practícalo, convéncete y comienza a vivir sus bondades.