Para algunas culturas, cada persona cuenta con un animal guía o tótem. Cada animal posee una esencia única que lo diferencia del resto y saber cuál es el tuyo puede ayudarte a desarrollar algunas de las cualidades características del animal.
La historia del concepto de animales tótem o guía, se remonta a nuestros ancestros, cuando las tribus convivían muy de cerca con la naturaleza. El hombre primitivo, que conocía las cualidades específicas de cada ser vivo, procuraba captarlas y adquirirlas para su propio espíritu. Tras la caza, el hombre conservaba un colmillo, una uña o un trozo de piel de su presa porque creía que en ese fragmento se condensaría toda la fuerza y la energía del animal que había sido cazado con respeto y admiración. El hombre, mediante esta práctica, adquiriría el poder del animal.
Al igual que el hombre primitivo, muy a su manera, captaba “el poder” de las diferentes especies, conocer hoy a nuestro animal guía puede ayudarnos a obtener simbólicamente su energía.
Existen diversas maneras de conectarnos con nuestros animales guía, aunque las principales se relacionan con los sueños y la meditación. Hace falta ser disciplinado para poder no solo conocerlo, sino realmente aprovechar su energía.
Consejos para conocer a tu animal tótem:
Relajarte, meditar y dormir.
No será fácil conocer a nuestros tótems si intentamos dormir o meditar preocupados, pensando en las obligaciones, el trabajo, la ropa en la lavadora o si dejamos el televisor encendido. Asegúrate de que tu entorno sea el más adecuado para relajarte tanto para la hora de dormir como la de meditar. Una rutina adecuada de meditación y sueño puede ayudar a que te relajes mejor y tener una mayor apertura para detectar y conectarte con tu animal guía.
Registrar tus sueños.
Ten al lado de tu cama, una libreta para registrar cada mañana aquello que hayas experimentado mientras dormías, o aprovecha la tecnología y usa una grabadora o aplicación en tu celular para grabar y registra tu experiencia al despertar.
Poner atención a los detalles.
Tu animal puede aparecer en tus sueños más de una vez. Es necesario poner atención en los detalles del sueño para llegar con mayor exactitud a encontrar a nuestro animal guía. Observa qué estaba haciendo tu animal cuando lo viste, si volaba, si nadaba, cómo era su expresión, su color y sus alrededores. Lo mismo aplica para las revelaciones que tengas durante tus meditaciones.
Meditar con intención.
Para identificar a nuestro animal guía, será necesario enfocar nuestra mente en un objetivo fijo a la hora de meditar, de modo que se establezca un vínculo de intención entre tú y el animal. Te sugerimos esta meditación para contactar a tu animal guía.
Tu opinión es importante...compártela aquí: