¿Existe lo predeterminado en la vida? ¿creencias como la astrología, numerologia y otras, marcan nuestro destino? La respuesta definitiva es NO.
La base y fin de las ciencias de adivinación y otras tendencias descriptivas de la personalidad, es que son otorgadas como herramientas de autoconocimiento y crecimiento personal. La mejor manera de usar estos conocimientos a nuestro favor es como una forma de autoanalisis. Por ejemplo, puedes estudiar las características asignadas a tu signo astrológico y empatarlas con tu propio caracter, reconociendo lo que hay en tu conducta, aquello que coincide o no con tu personalidad. Esto significa que tienes la oportunidad de analizar las interpretaciones asignadas y usar la información que obtengas para cambiar tu vida, reconociendo y dejando brillar tus puntos a favor, y aceptando y trabajando tus debilidades. Trabajar correctamente con las ciencias proféticas parapsicológicas las convierte en la ayuda ideal para percibir nuestras limitaciones, fomentar intencionalmente nuestras cualidades, y evitar el desarrollo de egos.
Esto no quiere decir que estas ciencias no tengan verdad en ellas, ¡al contrario!... sus raíces datan de miles de años atrás, con las marcas de las variaciones y adaptaciones del tiempo, siempre guardando inmensa sabiduría y por lo regular bases muy complejas, estudiadas y enseñadas por grandes culturas y maestros alrededor del mundo. Sin embargo, el mejor aprovechamiento de sus tratados es considerarlos como herramientas que dan guías de temperamento, fuerzas, areas de oportunidad, talentos naturales, motivaciones, defectos, propositos de vida, etc., guías que no son definitivas, pues el trabajo personal y voluntad pueden modificarlas en cualquier momento que así se decida.
El uso del libre albedrío en este tipo de conocimientos depende de tí, concientizarlo y actuarlo te coloca en el punto de mayor ventaja del uso de tu libertad de creación, una oportunidad más de convertirte en la mejor versión de ti mismo.
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