En la mayoría de los casos, lo que obtienes es muy similar a lo que esperas obtener. Difícilmente ganas más de lo que esperes ganar. Y difícilmente ganas menos.
Los demás generalmente te tratarán de la manera en que tú esperes que te traten. Para que tus resultados mejoren, primero debes mejorar tus expectativas.
Si realmente te planteas ganar más dinero, encontrarás naturalmente la manera de hacerlo. Si respetas a los demás lo suficiente como para esperar lo mejor de ellos, verás cómo su desempeño pasa a ser sobresaliente.
No bases tus expectativas en lo que haya sucedido en el pasado. En cambio, deja que sean guiadas por lo que deseas del futuro. Libera tus expectativas de falsos límites impuestos por desilusiones pasadas. Tienes todo para esperar lo mejor de tu futuro. Si lo haces, muy probablemente encuentres la manera de convertirlo en realidad.
Tu opinión es importante...compártela aquí: