El tiempo de primavera es bueno para ponerle ganas
y más celeridad a nuestros planes. No podemos seguir evadiendo ni
quedarnos quietos; es momento de ir más allá, conquistar, atrevernos, hacer las cosas de una manera diferente, ejecutar nuestros proyectos.
Este es el tiempo de los inicios, de retomar iniciativas postergadas o ejecutar nuevas; hay que hacer de cualquier
obstáculo una oportunidad para actuar de forma nueva. Llego el momento de plantar, ya que nos encotramos en días “semilla”, en los cuales podemos
sembrar con mucha creatividad, saliendo de nuestros límites y manteniendonos
alerta, pues la energía se exacerba desde su lado
luminoso: acción, fertilidad, iniciativa, valentía, renacimiento.
Este es, además, un buen tiempo para mirar el año y decidir algunas acciones; este equinoccio, como cada año, nos llaman a salir a la conquista de nuestros
sueños, sintiendo confianza en nosotros mismos, junto con entretenernos
con lo nuevo que encontremos ya que este es el momento de sembrar todo aquello que deseamos realizar.
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