El timo es
muy sensible a imágenes, colores, luces, olores, sabores, toques, palabras y
pensamientos; especialmente se verá afectado por dos sentimientos que circulan
por el chakra del corazón: el odio y el amor. Esta glándula se ve influenciada
de acuerdo con los sentimientos negativos o positivos de cada persona.
Aunque la disminución
del tamaño del timo con la edad es un proceso natural, también se ha comprobado
que el timo disminuye su tamaño cuando nos encontramos en estado de estrés
mental, cuando estamos tristes, desilusionados o padecemos una infección o
enfermedad grave, llegando a reducir su tamaño a la mitad en un solo día.
El timo
aumenta su tamaño ante una situación de alegría y por él comienza a circular
energía positiva, así nuestro cuerpo y mente se armonizan y fluye mejor la
energía vital.
Cuando tú
sientes odio tu timo se encoge y se debilita, mientras que si sientes amor o
ternura, tu timo se refuerza y agranda. Entonces diremos que los pensamientos
positivos lo activan y los negativos lo inhiben.
Un timo
activo y trabajando a nuestro favor se reflejara en una mejor salud, un fuerte sistema
inmunológico y una sensación de vitalidad, energía y positivismo.
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